Por Andrés de Bedout Jaramillo*
Esta semana tuve la oportunidad de escuchar las
posturas del candidato conservador a la Gobernación de nuestro Departamento.
Desde hace como 20 años no veíamos en el tarjetón de gobernadores para Antioquia
un candidato conservador, partido fundado hace como 170 años, que tiene a la
familia como el núcleo de la sociedad, que se rige por los principios de la
religión católica, que defiende a la libertad y el orden, que hoy tiene a un
joven candidato a la gobernación de Antioquia, dispuesto a hacer valer estos
principios, para bien de la sociedad, priorizando el interés general sobre el
interés particular; un joven representante de los demás jóvenes dispuestos a
los caminos de la verdad y el amor.
Los conservadores debemos hacernos contar en
las elecciones del próximo 27 de octubre. No podemos perder esta
oportunidad que se nos presenta a través de un líder joven, valiente y
decidido, guiado por los principios de nuestra religión católica y por un
profundo convencimiento de recuperación de la institucionalidad como principio
de solución a los problemas que nos carcomen.
El partido, en crisis de liderazgos, acertó al
darle el aval a un joven líder, Juan Camilo Restrepo, con experiencias exitosas
en los sectores público y privado, valiente y decidido, pero se equivocó
abandonándolo. Desafortunadamente si el partido no aprovecha esta oportunidad,
seguirá por el sendero de su autodestrucción, que empezó hace muchos años con
los egoísmos internos generados por nuestros líderes en los que primó la
satisfacción de intereses personales y grupales. Así nos dejaron huérfanos a
los conservadores del común, a tal grado que esos mismos líderes se fueron al Centro
Democrático, a continuar allí sus confrontaciones y a generarle problemas a ese
relativamente nuevo partido, con problemas de viejo partido.
Yo creo que Colombia debe cimentar la política
en los partidos, lo que sería el inicio de la recuperación de la
institucionalidad. Los partidos deben ser reflejo de la búsqueda del
interés general a través del servicio; no pueden seguirse convirtiendo en la
búsqueda de intereses particulares de pequeños grupos de personas que buscan perpetuarse
en el poder, cerrando las posibilidades a los nuevos liderazgos jóvenes, como
el que hoy se le presenta al partido Conservador en Antioquia, con Juan Camilo
Restrepo, quien inyectándole liderazgo nuevo y joven al partido, se convierte
en una excelente opción para gobernar a Antioquia y refundar el partido en
nuestro departamento. Hay que darle cabida a los jóvenes que comulgan con los
principios del partido. Recuerdo mucho a mi padre Jacques de Bedout Villa, conservador
de los de verdad, que practicaba sus principios con devoción. Recuerdo los
sábados conservadores, destinados a la capacitación, al consejo, a la
satisfacción de las necesidades más elementales de los conservadores más
necesitados, a eso deben regresar los partidos, como semilla del volver al
interés general.
Si los que a nombre del partido que ostentan
hoy las mieles del poder en el congreso, asamblea y consejos, dejaron solo al
candidato avalado, por pensar en sus intereses personales, los que nos
consideremos conservadores del común, sin prerrogativas, así tengamos otras
preferencias, debemos abandonarlas para acompañar la causa de las nuevas
posibilidades, de los nuevos vientos para nuestro partido.
Esta es la oportunidad, para que los
conservadores, que desde años atrás nos hemos venido sintiendo huérfanos de
partido, la demos toda, acompañando a Juan Camilo Restrepo.
Su programa de gobierno satisface mis
expectativas, además de estar dispuesto a llegar hasta el final, llenándonos de
esperanzas a los conservadores y a los antioqueños en general.
Recuperemos el partido, la institucionalidad,
para los conservadores del común, aprendamos del ejemplo de valentía y arrojo
que nos está dando Juan Camilo Restrepo, acompañémoslo, no perdamos esta
oportunidad. Si nos ponemos todos los conservadores a motivar a nuestros
copartidarios, familiares y amigas(os), reventando las redes sociales y las
relaciones interpersonales, podremos lograrlo. Trabajemos duro para que vean
las calidades y cualidades de nuestro candidato en los debates que faltan,
necesitamos subir rápidamente el nivel de reconocimiento del candidato.
Juan Camilo Restrepo ha sido muy claro, tiene
el aval y va con toda, sin alianzas, sin apoyos a candidato a la Alcaldía de
Medellín, en vista de no haber el partido avalado a ninguno.
Yo me sentiría muy feliz de volver a ver un Partido
Conservador con identidad propia, donde los militantes que migraron a otros
partidos regresaran, donde la inclusión, el equilibrio, el trabajo social con
autoridad y mucho desprendimiento, permita vencer la iniquidad. Que el Partido Conservador
regrese a las épocas donde el interés general prevalecía claramente sobre el
interés particular.
Las circunstancias están dadas, no nos
preocupemos por las encuestas, preocupemos por el futuro de Antioquia, bajo los
principios conservadores de nuestro partido, que nuestro voto deje de ser
visceral, que sea un voto consciente y responsable para bien de las
generaciones futuras.
En esta contienda electoral para gobernador de
Antioquia, el centro derecha que ofrece Juan Camilo a nombre del partido
conservador, sería lo mejor para nuestro departamento y para el resurgir
institucional partidista sin entregarse a alianzas que obligan a servir a
muchos señores, de grandes egos, impidiendo el interés general como objetivo
fundamental de la política destinada al servicio de las comunidades.
Juan Camilo Restrepo, líder joven, fogueado en
los campos públicos y privados, católico de convicción, se va hasta el final,
yo lo voy a acompañar y le pido a los conservadores y a los jóvenes en
Antioquia que lo acompañemos para ganar las elecciones entre todos y recuperar
al Partido Conservador para los jóvenes de Antioquia, para que las generaciones
futuras participen en la reconstrucción de un partido que en sus principios
representa la esperanza de Antioquia.