viernes, 2 de junio de 2023

De cómo ganarse enemigos

Por José Leonardo Rincón, S. J.

Ofrezco un curso rápido y eficiente de cómo ganarse la animadversión de muchos en poco tiempo. Podría llamarse también “Curso intensivo de masoquismo”.  Se trata de muy breves lecciones que los sabios en la materia aconsejan para perder rating rápidamente y sin mucho esfuerzo en ambientes acomodados y bien instalados. Especialmente recomendado para aquellos que no están buscando el poder, sino que quieren hacer las cosas lo mejor posible y anhelan vivir en paz a pesar de la gratuidad de volverse detestables para los que se sienten inseguros y amenazados en su zona de confort. Por favor, si quiere tener éxito, siga cuidadosa y estrictamente el siguiente decálogo de instrucciones:

1. Sea auténtico, es decir, sea usted mismo. No use máscaras ni disfraces. Muéstrese como es. Expréselo en su rostro sin tapujos. Evidencie en sus gestos cuando esté a gusto y cuando no lo esté. No finja lo que no siente.

2. Haga las cosas bien, busque la excelencia y luche contra la mediocridad. Puede tener el efecto contrario, pero generalmente incomodará a los defensores del statu quo.

3. Sea políticamente incorrecto. Deje de lado la diplomacia, sea franco y directo. Parecerá imprudente, altanero y hasta grosero.

4. Trabaje por la meritocracia. Evite amiguismos y roscas. Rodéese solo de los mejores. No favorezca influencias y palancas.

5. Conserve la distancia ante su jefe. Niéguese a ser un áulico, obsecuente, lambón o capillero. Si no está de acuerdo, dígalo abiertamente.

6. Corrija a sus subalternos por más amigos que sean y si no le hacen caso después de decirlo varias veces, emberråquese de modo que coja fama de bravo y malgenio. Nadie recordará lo primero, pero todos lo segundo.

7. Ábrase el camino del éxito evidenciando logros y resultados. La gestión eficiente es lo que cuenta. No acepte palabrerías, promesas y bellos discursos de ocasión.

8. Busque ser libre. Tómese su tiempo para discernir decisiones importantes, pondere los pros y los contras. No acepte presiones con argumentos de autoridad.

9. Adopte posiciones claras y firmes. En cuestiones de principios y valores no negociables, no sea veleta, tampoco mimético camaleón. No busque darles gusto a todos, ni se deje manosear, así aparecerá terco e intransigente.

10. Finalmente, si ha seguido estos consejos, sin proponérselo usted, ha suscitado automáticamente celos y envidia. Es mejor despertarlas que sentirlas. No crea que la precisión suiza, la disciplina alemana, la justicia sueca o la puntualidad inglesa funcionan en Macondo. Aquí el tropicalismo y la improvisación son proverbiales. Esos rigorismos son propios de espartanos y anglosajones, culturas cuadriculadas. Es mejor tener como lema: “laissez fiare, laissez passer”, o “usted no se meta conmigo que yo no me meto con usted”, que en otras palabras significa “hagámonos pasito”. Suerte en el taller práctico. A usted le puede ir muy bien si se deja llevar por la corriente. Lo que no gusta es que usted posea una personalidad firme y segura, tenga agallas y cambie el curso de la corriente.