lunes, 18 de mayo de 2020

Políticamente qué somos


Por Antonio Montoya H.*

Antonio Montoya H.
Por Antonio Montoya H.*

Después de vivir esta época diferente de la humanidad, de palparla  en forma directa y real, de sentir el dolor de la muerte aunque lejana aun para mí, sí cercana por ser los fallecidos de la ciudad, barrio, o afín a amigos y conocidos nuestros, y de leer, observar el acontecer diario de la vida pública y privada, me viene a la mente una inquietud ya desde el punto de vista político y social, que vale la pena plantearla porque de ahora en adelante las cosas cambiarán radicalmente; puede que sea lenta e imperceptiblemente, pero es seguro que no serán iguales al día antes de la pandemia. Hay una específica y quiero expresarla porque hace referencia al comportamiento de nuestros líderes, de los políticos que tienen el cuidado y bienestar de la comunidad.

Hoy no importa de qué partido político hacemos parte, o a qué líder preferimos, no vemos diferencia entre el centro, la derecha, la izquierda; no son mejores los malditos guerrilleros, ni son mejores los funcionarios públicos, hoy estamos todos dedicados a sobrevivir, a pasar un día detrás de otro, para no ser víctimas del virus, para no llevar la peste encima y no terminar la vida gracias a una enfermedad que no tiene preferencias, que simplemente llega y nos lleva.

La política debe ser considerada hoy de otra manera, debe ser más humana, más sensible, menos llena de odio, más tolerante, sin corrupción, proactiva, buscando la esencia de esta que es el bien y cuidado de la ciudad, pensando en el ciudadano y el mejoramiento de las condiciones de vida.

No es época de violencia verbal, que repugna; de debates insulsos, que no tienen ningún sentido; de conflictos por las reuniones virtuales del congreso, que si son validas o no, que si se puede votar o no, es una absoluta irrelevancia en las circunstancias de país que vivimos; nadie quiere ver ese comportamiento, agresiones, insultos, no se habla con propiedad, no se analizan los temas en profundidad, es un descuadre total y absoluto en donde debe primar el sentido común, la cordialidad y unificar un pensamiento en beneficio de todos los colombianos.

Hoy siguen en las mismas. Los extremos, por un lado, liderados por Petro, y sus seguidores, y el Centro con su grupo, y por otro lado una serie de periodistas que lo único que hacen es picar y picar para que las partes se respondan mutuamente y aumente la agresión; periodistas que no respetan al gobierno, hablan de la vicepresidenta, y no valoran el trabajo que están haciendo en beneficio de todos sin exclusión alguna.

Eso hace que los bandidos aprovechen la crisis de la salud, de la economía y continúen su carrera del mal, acabando en el Cauca con todo a su paso y sobre ello, lamentablemente no veo pronunciamiento de los partidos.

Quisiera que alguien me dijera si los políticos han actuado acordes con la crisis o están aprovechando para sacar partido de ella. En qué han contribuido a que la sociedad mejore, se sostenga o por lo menos mitigue sus angustias… yo la respondo diciendo que en nada.

Por ello, al final invito a los ciudadanos a que pensemos en construir una política social sin partidos, con personas que no pretendan robar el dinero público, que en las ciudades y municipios se valore el humanismo, ese respeto por el otro, que seamos solidarios con el desamparado, que valoremos lo mucho o poco que tengamos y no le quitemos nada al otro, que lo ha trabajado diariamente.

Menos politiqueros, más humanismo, menos egoísmo y más solidaridad. Esa es la política que necesitamos y queremos. No a la izquierda, el centro o la derecha si no aportan beneficio social.