lunes, 3 de junio de 2019

Me molesta


Por Antonio Montoya H.*

Antonio Montoya H.
Y mucho, que la Corte, el Consejo de Estado y la misma JEP, estén como la esfinge de la justicia, con una venda negra que impide mirar el horizonte y más grave aún, que hace que olviden el presente y tomen decisiones catastróficas, contra toda evidencia, por una simple razón, porque la justicia da tumbos, no tiene un norte, no se respeta la jurisprudencia, oscilan sus fallos de acuerdo al vaivén  que va tomando el país, que casi todos lo sabemos y negamos esa realidad, que no es otra que el de la izquierda visceral del odio y el poco aporte.

Pero, más que lo anterior me molesta ver a Santrich, ahora sí erguido, levantando la mano, con aire triunfador, exuberante de salud y no como hace quince días, en silla de ruedas, como una víctima subiendo al cadalso, directo a la clínica porque estaba al borde del colapso y esa actuación no era sino una payasada más, de las muchas que permanentemente realiza la izquierda colombiana. Es como la de Márquez, El Paisa, arrogantes, no sometiéndose a la justicia, y diciendo que no hubieran entregado las armas; pues que las cojan y que se vayan al monte, que por las armas intenten lograr algo de lo que no pudieron ganar en 55 años de conflicto. Con Santos lo lograron en una paz espuria, no ganada ni en las armas ni en votación libre. Son comportamientos de uno y otro que hacen ver una sola verdad, y es que nos creen estúpidos, que a punto de cuento nos van a convencer que aceptan el ejercicio de la democracia.

Molesta, que la juventud coma cuento. Tal vez entiendo la razón, que es la de ver el pobre espectáculo que dan en el congreso personas como Roy Barrreras, Benedetti, y otros senadores y representantes que piensan en el interés personal y no en el desarrollo de la sociedad.

Molesta, que la historia de este país se desconozca, que la repitamos y de una y otra forma sea la misma, muerte, venganza, odio y más violencia.

Molesta, que para ser candidato a las gobernaciones, alcaldías, asambleas y concejos, la mayoría, habiendo sido miembros de los partidos, busquen el aval por firmas. ¿Dónde quedaron los partidos que es la base de la democracia?, ya sean liberales, conservadores, verdes, del polo o cualquier otra  denominación que se le quiera dar. Una democracia para que sobreviva, requiere de la disciplina, orden y trabajo de los partidos; lo cual hoy, junio 3 de 2019, es inexistente.

Molesta que la izquierda, critique, acuse, despotrique de la sociedad colombiana, que no cejen en su empeño malicioso y molesto de no aportar y apostarle a la catástrofe, para ellos convertirse en los salvadores de la unidad nacional.

Por último, invito a los que quieren un cambio de rumbo del país, a que den una mirada a los países que han tenido gobiernos de izquierda en los últimos 20 años, qué desarrollo tienen, qué infraestructura han implementado, cómo está el turismo, el empleo, la educación y su sector empresarial, y luego decidan con criterio si es bueno ese rumbo y puedan llegar a una conclusión clara y precisa, antes de caer en las garras del populismo.