martes, 12 de agosto de 2025

De cara al porvenir: los negocios y la inteligencia emocional

Pedro Juan González Carvajal
Pedro Juan González Carvajal

El proceso de evolución y desarrollo más normal de las actividades económicas tiene que ver con el ejercicio de maduración de los negocios antes de que se puedan estructurar empresas, reconociendo que es el espíritu de los negocios el que hace posible el desarrollo de la actividad empresarial.

Hay que tener en cuenta que es más importante tener visión de negocio que visión de empresa, pues la primera es prerrequisito y es quien potencia la posibilidad de llegar a estructurar una empresa.

El gestor de negocios es un hombre con iniciativa, emprendedor, paciente, con alta capacidad de riesgo y de sacrificio.

De la idea primigenia se pasa a su puesta en marcha, organización, aplicación de recursos, establecimiento de procedimientos y definición de políticas y objetivos macro.

Como hablamos de individuos, de personas, es necesario tener en cuenta su personalidad, su carácter, su estabilidad emocional, su capacidad de relacionamiento, su flexibilidad, su terquedad y su pasión.

La inteligencia emocional se refiere a la habilidad de entender, usar y manejar las emociones propias y las de los demás de manera efectiva. Implica reconocer las propias emociones, comprender las emociones de los demás y usar esta información para guiar el pensamiento y el comportamiento.

Componentes de la inteligencia emocional:

* Autoconciencia: reconocer las propias emociones y cómo afectan el comportamiento y las relaciones.

* Autorregulación: gestionar las emociones de manera efectiva, incluyendo el control del estrés y la capacidad de recuperarse de los contratiempos.

* Empatía: comprender las emociones de los demás y ponerse en su lugar para entender sus perspectivas.

* Habilidades sociales: interactuar con otros de manera efectiva, comunicándose con claridad y resolviendo conflictos de manera constructiva.

* Motivación: dirigir las emociones hacia metas y objetivos, manteniendo el entusiasmo y la persistencia a pesar de los desafíos.

Importancia de la inteligencia emocional:

* Mejora las relaciones: la inteligencia emocional facilita la construcción de relaciones más fuertes y saludables al permitir una mejor comunicación y comprensión de los demás.

* Aumenta el éxito profesional: la capacidad de manejar las emociones y las relaciones interpersonales es crucial para el liderazgo, el trabajo en equipo y la resolución de conflictos en el ámbito laboral.

* Promueve el bienestar: la inteligencia emocional ayuda a manejar el estrés, a tomar decisiones más informadas y a fomentar una actitud más positiva hacia la vida.

* Facilita el aprendizaje: al comprender cómo aprendemos y procesamos la información, la inteligencia emocional puede mejorar el proceso de aprendizaje y la capacidad de adaptación.

Desarrollo de la inteligencia emocional:

* Autoconocimiento: reflexionar sobre las propias emociones, identificar patrones y comprender cómo afectan el comportamiento.

* Regulación emocional: aprender técnicas para manejar el estrés, la ira y otras emociones difíciles.

* Empatía: practicar la escucha activa, ponerse en el lugar de los demás y tratar de entender sus perspectivas.

* Habilidades sociales: mejorar la comunicación, la resolución de conflictos y la construcción de relaciones positivas.

* Motivación: establecer metas realistas, mantener una actitud positiva y perseverar ante los desafíos.

Como podemos observar, el gestor de negocios posee unas condiciones particulares que le permiten aterrizar ideas en realidades, apoyándose en personas a quienes debe instruir para que le permitan soliviar de manera correcta la pesada carga que implica un verdadero emprendimiento.