En el conversatorio de la semana para El Pensamiento al Aire, Antonio Montoya H., habla con el contralmirante Gabriel Ernesto Arango Bacci quien logró una destacada presencia en la Armada Nacional hasta que su carrera fue truncada por falsos testimonios de su vinculación con el narcotráfico. Esta es la primera parte de su historia; no dejes de verlo. El almirante Gabriel Ernesto Arango Bacci nació el 1 de enero de 1953 en Barranquilla, Colombia. Desarrolló una destacada carrera en la Armada Nacional, alcanzando altos cargos de responsabilidad. Había iniciado su carrera militar en la entonces denominada Escuela Naval de Cadetes, en Cartagena, en enero de 1971 y durante los 36 años que duró la misma, se distinguió por su gran capacidad de liderazgo, por sus amplios conocimientos de Ingeniería Naval y, especialmente, por actuaciones pulcras y transparentes, comportamiento que le permitió recibir el bastón de mando de Contralmirante de la República de Colombia. En 2007, fue retirado del servicio y, en 2008, detenido por presuntos vínculos con el narcotráfico. Sin embargo, en diciembre de 2009, la Corte Suprema de Justicia lo absolvió de todos los cargos, declarando su inocencia. Posteriormente, en 2020, el Consejo de Estado ordenó a la Fiscalía indemnizarlo por la privación injusta de su libertad, reconociendo los perjuicios materiales y morales sufridos por él y su familia.