Andrés de Bedout Jaramillo
En reciente
reunión se plantearon los requisitos que deberían cumplir los posibles
precandidatos a la Presidencia, Senado y Cámara, para las elecciones de 2026.
Se habló de la
teoría del péndulo, que se mueve de la extrema izquierda a la extrema derecha,
una forma nueva de mirar la polarización, como inconveniente para el país,
recomendándose líderes de centro, con gran capacidad negociadora y
conciliatoria, para juntar los quereres de los extremos, líderes que tengan la
capacidad y el valor de llamar las cosas por su nombre, de no engañar con
mentiras a sus electores, líderes que en su trayectoria pública hayan obtenido
muy buenas calificaciones, que se distingan en el respeto por los dineros
públicos y sean ejemplo de austeridad en sus formas de vida, líderes prudentes,
con mucha experiencia, seriedad y determinación.
Líderes que
valoren y respeten la libertad de empresa y la importancia de la empresa
privada para el país.
Líderes
trabajadores, responsables, de vida sana, cumplidores de sus compromisos,
dispuestos a la difícil tarea de reconstrucción del país, que ya está lo
suficientemente destruido por la pésima e irresponsable administración actual,
sumido en la más profunda corrupción.
Líderes con gran
capacidad de conformar equipos de trabajo de colombianos con experiencia,
responsables, austeros, de vida sana, conciliadores.
Líderes
dispuestos a someterse a un mecanismo que permita definir entre varios, a un
candidato único, que enfrente al candidato de la extrema izquierda, que se va a
moler para continuar en el poder, con sus políticas destructivas de la unidad y
solidaridad entre colombianos y de la economía en todos sus sectores,
permitiendo la gran corrupción que estamos viviendo.
Líderes que se
distingan por sus buenas maneras en el trato con sus semejantes. A hoy,
pueden haber más de 20 precandidatos, hombres y mujeres, que ya deben auto
convocarse a una reunión, para iniciar conversaciones entre ellos con miras a
llegar al candidato único, que enfrentará al candidato de la extrema izquierda,
Petro.
El propósito
común es el de llegar a un candidato único, respaldado y acompañado
irrestrictamente por los otros precandidatos, durante y después del proceso,
mejor dicho, formarían un equipo tan sólido, que del grupo podrían salir los
miembros del equipo de gobierno.
En mi humilde
opinión me atrevo a proponer a Sergio Fajardo, David Luna, Paloma Valencia,
José Manuel Restrepo, Enrique Gómez y Mauricio Cardenas, a quienes, entre
otros, considero cumplen con los requisitos, y si ellos lo consideran
pertinente, podría hacer parte del grupo de precandidatos que por el bien del
país enfrentarían a la izquierda de Petro, con miras a la reconstrucción.
Pidamos al
Espíritu Santo, iluminar y dar valor a los posibles precandidatos, para sacar
adelante este propósito.