Por José Alvear Sanín*
Nunca se nos permitirá saber si Petro ganó en las urnas o
en la Registraduría, pero siempre sabremos que Colombia perdió.
La derrota estaba cantada desde cuando no se escogió con
tiempo un candidato viable. El azar llevó al señor Hernández a disputar la
Presidencia: ¡Tres semanas de monotema táctico contra doce años de calculada
estrategia!
Faltan meses para saber si el nuevo gobierno será de modelo
Amlo, o Maduro, o si finalmente vamos a un fundamentalismo tipo Castro o Pol
Pot.
Entre tanto lo juzgaremos objetivamente, por sus hechos.
Hasta ahora solo conocemos algunos inquietantes nombramientos y, detrás de un
propuesto acuerdo nacional; vemos asomarse el espectro lívido de una
constituyente.
¡Ecopetrol, la visionaria creación de Ospina Pérez,
expira, y en las casas de cambio no hay un dólar!