miércoles, 19 de julio de 2023

Colombianos contra la revolución comunista

Luis Alfonso García Carmona
Por: Luis Alfonso García Carmona

Ante el fracaso de la utopía comunista, se impuso el marxismo-leninismo un drástico cambio en su estrategia para sobrevivir.

Cambiaron el rótulo de comunistas por progresistas, movimientos alternativos, partidos verdes, etc. En Colombia se han hecho llamar “Polo Democrático”, aunque nunca la violación de las prácticas democráticas haya sido óbice para buscar sus objetivos; o, “Colombia Humana”, a pesar de que la dignidad de la persona humana brilla por su ausencia en su funesta política.

Al tomar por asalto el poder, mediante el monstruoso fraude denunciado por la ciudadanía ante la Comisión de Acusaciones de la Cámara de Representantes, todo el aparato gubernamental ha sido puesto al servicio de la revolución comunista: desmantelamiento de las fuerzas armadas, creación de milicias irregulares pagadas por el Estado, debilitamiento de la empresa privada, pauperización de la población, destrucción de la familia, impunidad para los criminales, fortalecimiento del negocio ilícito de la cocaína, creación de organismos alternos para implantar la revolución dentro del contexto de la negociación con el ELN, para no ir muy lejos.

Contra esa revolución en marcha, mantienen nuestros dirigentes políticos un culpable mutismo. Ensimismados con las próximas elecciones regionales, sólo los desvelan sus apetitos burocráticos y presupuestales.

Corresponde, en consecuencia, a los ciudadanos de bien, a quienes sentimos que la patria se nos va a pique, a quienes pensamos en el futuro de quienes nos sucedan, rescatar a Colombia mediante un movimiento contra revolucionario que impida el desastre definitivo.

Hagamos la contra revolución del orden, la seguridad y el respeto a la Ley.

Hagamos la contra revolución para defender nuestra libertad, nuestra dignidad como personas humanas y nuestros derechos fundamentales.

Hagamos la contra revolución para rescatar los principios que dieron vida a nuestra nación, el respeto a la familia tradicional, el derecho a la vida desde la concepción, la protección de nuestros bienes, el derecho a tener un trabajo digno o a formar una empresa que contribuya a la generación de empleo.

Recibí la siguiente pregunta de un gran amigo y, además, distinguido profesional: “¿Cómo puedo yo participar en esta lucha para rescatar a Colombia?”.

Le respondo con el mayor gusto: convirtámonos cada uno de nosotros en coordinador de una célula para rescatar a Colombia, con 10 personas más, que podemos reunir dentro de nuestros familiares, compañeros de trabajo o estudio, amigos cercanos. Estoy seguro de que todos podemos conformar una célula tan pequeña.

Tenemos 3 años para organizar el movimiento contra revolucionario “Colombianos al Rescate” que recupere el poder y eche por tierra los infames proyectos de este tenebroso régimen totalitario. Pongámonos la meta de formar 1.00.000 de células en 3 años, lo que nos arroja 333.333 por año, o sea 6.410 semanales, en todo el territorio nacional.

Ya existen varias organizaciones trabajando en la programación de las marchas y plantones, recolección de apoyos al juicio político para derrocar a Petro y otras labores puntuales, que podrán coordinar esta “contra revolución celular” que el país reclama a gritos.

Nos asiste la razón, pues no pretendemos nada distinto al bien común de todos los ciudadanos. Todo el que esté en contra de la revolución comunista, desprestigiada en el mundo, podrá participar en esta hora crucial en la que la patria necesita de sus buenos hijos. ¿Nos acompañarás en este noble causa?