Por John Marulanda*
Desapercibida en medio de la contienda electoral, se escurrió
la noticia de la presencia de soldados, barcos y aviones rusos en Nicaragua. Desde
hace casi tres décadas (primer gobierno sandinista 1979-1990), el país centroamericano
viene coqueteando con el Kremlin y hacia 2014 se habló de la dotación de 10 vetustos
tanques rusos T2 al autoritario Ortega y su esotérica esposa Rosario.
Ayer nomás, fue aprobado por la asamblea orteguista un decreto
presidencial publicado el 07 de junio en el Diario Oficial del país, que renovaba
la solicitud del dictador para la presencia de tropas y aprestos de guerra rusos
con el objeto de “participar en ejercicios de adiestramiento e intercambio en
operaciones de ayuda humanitaria”, en los espacios de Nicaragua en el Mar Caribe
y en sus aguas jurisdiccionales. Tal autorización va del 1º de julio hasta el 31
de diciembre del presente año.
El orteguismo, que silencia voces como la de la Academia de
la “Lengua cortada”, según dice Sergio Ramírez, mientras celebra el día del idioma
ruso en Managua y León, también acoge la estación terrestre del Sistema Global de
Navegación por Satélite (Glonass), una enigmática estación instalada desde 2016
cerca de la laguna de Nejapa, que se presume sea un centro de espionaje. De manera
que Nicaragua, por todos lados, es una plataforma al servicio de Rusia, al igual
que Venezuela y Cuba.
Con esos tres alfiles equipados militarmente por Moscú, pareciera
que los motivos de la presencia rusa conllevan razones más oscuras, especialmente
cuando una vocera en la televisión rusa dijo que “si los sistemas de misiles
estadounidenses casi pueden llegar a Moscú desde el territorio ucraniano, es hora
de que Rusia despliegue algo poderoso más cerca de las ciudades estadounidenses”.
Sería como la reedición de la crisis de los misiles cubanos a principios de los
60. Lo que sí es claro, es el progreso propagandístico a través de RT (Russia Today)
cadena televisiva que ofrece sus noticias en 23 países y en más de 300 proveedores
de televisión por cable en la región, a través de su supérstite venezolana Telesur.
Para el profesor Vladimir Rouvinski, “Moscú (…) parece estar ganando terreno
en la batalla por la mente de los latinoamericanos”. Y cuando hablamos de mentes,
hablamos de política.
Las frías relaciones Petro-EU han llevado a que uno de sus lugartenientes
muestre su intranquilidad porque “la embajada americana o la DEA tengan como
agenda impedir que Petro sea presidente”, dice quien tuvo una reunión con Terry
Steers-González, consejero de Asuntos Políticos de US en el país: “Él ha hablado
con Petro varias veces”, contó el alguacil petrista. “… Sepamos que hay una
animadversión clara” remata. El candidato, asesorado por el comunista Sebastián
Guanumen, proclama que hará ajustes a los roles de las misiones en la llamada “Doctrina
de seguridad nacional”, que en su última encantadora carta a los soldados de
tierra, mar y aire, titula “Política Integral de Seguridad”; asegura que impulsará
la eliminación del fuero penal militar y muy probablemente se unirá en una abrazo
solidario y revolucionario con sus pares Maduro, Diaz-Canel y Ortega, convirtiendo
esta parte del continente en una plataforma “anti imperialista”, de la mano de Irán.
Como Venezuela. La misiva de antier, dicho sea de paso, llena de melosidades y promesas
irrealizables, muestra el camino clásico de los comunistas: enmelar a sus aparatos
de seguridad para garantizar su lealtad como guardias pretorianos. Como en Venezuela.
El otro candidato, por su lado, señala que hay que definir una
política clara que integre las necesidades de compra y modernización del equipo
militar.
En un mundo convulsionado por la agresión rusa a Ucrania, “Inicio
de la tercera Guerra mundial”, según el Papa, en proceso de reestructuración
de alianzas internacionales, con graves amenazas económicas gravitando sobre todos
nosotros, un rifirrafe marítimo fronterizo entre Nicaragua, apoyada por Rusia, Cuba,
Venezuela y Colombia, eventualmente apoyado por US y otros países, a lo largo del
meridiano 82 ¿estarán nuestras fuerzas aeronavales preparadas para defender ese
espacio marítimo vital? Una circunstancia como esa puede enrarecer el mandato de
quien sea electo, que esperamos sea RH. “Habría que ver también qué impacto podría
tener frente al proceso electoral que está en marcha y que entra en su recta final”
como plantea el general (R) Lemus Pedraza en su chat.
La pregunta es si frente a ese escenario geopolítico marítimo,
los dos finalistas para la segunda vuelta han ofrecido algo con previsión estratégica
o cederán ante el asedio de potencias extracontinentales como Rusia, precisamente.
La respuesta la tendremos este venidero y tenso 19.