lunes, 27 de junio de 2022

Reflexionemos y actuemos

Antonio Montoya H.
Por Antonio Montoya H.

Llegó la hora de reflexionar y actuar, pero con orden, después de que cada uno de nosotros los que perdimos la elección, hagamos el duelo y podamos analizar el presente y el futuro con serenidad, con estrategia y planeación para proyectar la forma de actuar coherente y masiva.

Debo expresar varias cosas para que ustedes y yo, en conjunto, podamos definir el camino a seguir, a saber:

*No olvidemos que los votos de la derecha fueron 10.454.000, que se perdió por 700 mil votos y que podemos afirmar que el país no solo tiene una división política, sino, también una división territorial, 17 departamentos con Gustavo Petro y 16 con Rodolfo Hernández. Esto nos lleva a concluir que el presidente no podrá actuar con total libertad cuando no cuenta con mayorías suficientes de ciudadanos y ello, lo hará reflexionar sobre la forma de acometer las reformas que pretende.

*La derecha está dividida a la vez en partidos y movimientos por firmas que obedecen a liderazgos individuales, no de grupos, lo cual conlleva a que las acciones de cada grupo serán diferentes entre sí y cada uno se creerá el dueño de la verdad. Esto hoy impide que se piense en forma colectiva, bajo unos criterios claros.

*A la vez, al interior de cada grupo o partido existen diferencias entre los miembros lo que conlleva a que su fuerza y liderazgo se pierda en la maraña de las discusiones haciendo imposible construir proyectos e ideas de largo plazo, por cuanto estas duran hasta las elecciones, no se trabaja la fuerza de unos principios coherentes y fijos que enmarquen el rumbo y que todos se sometan a ellos.

*Hoy, a ocho días del triunfo electoral de Gustavo Petro, se están efectuando reuniones entre el candidato elegido, los partidos políticos y sus líderes, buscando alianzas y un acuerdo nacional que permita tener gobernabilidad lo cual en sí mismo es válido, pero, puede traer consecuencias funestas el que los partidos se entreguen de una al gobierno de turno.

Lo que se pretende es tener un mejor país, generando confianza y dando estabilidad jurídica, económica y social, pero sí debemos ser sigilosos ya que la izquierda radical del candidato ganador, no da nada gratis y pueden obtener todo.

A pesar de  los acuerdos, y de  algo de estabilidad, es necesario que nos preparemos en  las regiones, y por ello, debemos pensar de una forma diferente, protegiendo el entramado social que representan los departamentos y sus habitantes, no contando con los partidos que ya no existen, ni con los movimientos por firmas que es son el principio del fin de las democracias, sino contando con todos los ciudadanos, un movimiento cívico fuerte, con ideas precisas, con fundamentos que hagan parte inequívoca del movimiento, en el que quepan todas las personas porque el objetivo es el de fortalecer las regiones, no el de buscar independencia o separación del estado Colombiano, se respeta y acata la soberanía, la autoridad del ejército nacional, las relaciones internacionales, pero se busca dar fuerza económica a las regiones fortaleciendo sus ingresos disponiendo en forma directa de ellos y entregándole al Estado una menor participación. Así fortalecemos la economía, damos fuerza a la política con alcaldes y gobernadores elegidos popularmente, pero con un sentido de acción regional con más recursos a disposición y obviamente con diputados y concejales que realmente puedan promover normas y gravámenes propios que ayuden al desarrollo de la región.

Las regiones o comunidades autónomas son claramente una forma de descentralización política, financiera y administrativa en la que sus habitantes tendrán más competencias para aprobar sus propias leyes. Será un gran cambio que facilita que las regiones se desprendan del centralismo que agobia.

En Antioquia existe un grupo de ciudadanos, como bien lo dijo  Bernardo Guerra en su artículo de hoy en las páginas del Colombiano, de diversas profesiones y oficios liderado por ciudadanos prestantes como Jesús Vallejo, Héctor Quintero, Félix Alfazar, Rodrigo Sanín, Julio González, Luis Fernando Duque, Óscar Urrea y otros más, grupo del cual hago orgullosamente parte, que está luchando y promoviendo la autonomía de las regiones incluyendo a Antioquia  y que en próximos días fijará el rumbo y la invitación a los ciudadanos a que hagan parte de esta propuesta de cambio económico, político y social en Colombia.

Propongo que el siete de agosto los antioqueños en muestra de acompañamiento al movimiento autonómico, se vista de verde para mostrar de una forma inequívoca que cree en la autonomía y en el fortalecimiento de la región de Antioquia.

Que viva la autonomía. Que viva Antioquia la grande.