martes, 25 de enero de 2022

De cara al porvenir: somos un país subdesarrollado porque...

Pedro Juan González Carvajal
Por Pedro Juan González Carvajal*

Aun cuando a muchas personas el término y el concepto de “país subdesarrollado” les parece anacrónico u ofensivo, para mí sigue teniendo plena vigencia. Otra alternativa generada gracias a un esguince gramatical sería hablar de “país en vía de desarrollo”, lo cual nos permitiría entonces hablar de “países incivilizados” o de “países en proceso de civilización”.

En un país como el nuestro, el del Sagrado Corazón, nos hemos acostumbrado a que muchas acciones y decisiones hagan parte del paisaje, lo cual nos hace indolentes, irresponsables y subdesarrollados.

Veamos algunos de los múltiples ejemplos que respaldan la aseveración anterior:

Somos subdesarrollados porque ante los atentados constantes contra la vida, la honra y la integridad de las personas, no reaccionamos y no pasa nada.

Somos subdesarrollados porque no respetamos ni valoramos en su verdadera dimensión a los jueces, a los maestros y a los policías y no pasa nada.

Somos subdesarrollados porque aceptamos que las arbitrariedades que cometen los diferentes actores, calificadas como “casos aislados” se vuelvan constantes y no pasa nada.

Somos subdesarrollados porque nos acostumbramos a ser parte del problema y no de la solución y no pasa nada.

Somos subdesarrollados porque nos seguimos descrestando con títulos, rangos y cargos en cabeza de mediocres y no pasa nada.

Somos subdesarrollados porque hacemos de lo ilegal una apología y no pasa nada.

Somos subdesarrollados porque el Estado recibe obras inconclusas y no pasa nada.

Somos subdesarrollados porque los contratistas entregan obras incompletas y/o de mala calidad y no pasa nada.

Somos subdesarrollados porque en este país no se cumple ningún presupuesto ni ningún cronograma y no pasa nada.

Somos subdesarrollados porque creemos que teniendo muchos órganos de control solucionamos la corrupción y no pasa nada.

Somos subdesarrollados porque no consolidamos un verdadero sistema de justicia y no pasa nada.

Somos subdesarrollados porque el mal llamado sistema educativo promueve la iniquidad, entorpece la movilidad social y no pasa nada.

Somos subdesarrollados porque toleramos demoras inauditas en la ejecución de los distintos tipos de proyectos y no pasa nada.

Somos subdesarrollados porque aprendimos a coexistir con las prácticas corruptas y no pasa nada.

Somos subdesarrollados porque pensamos en pequeñas dimensiones y no pasa nada.

Somos subdesarrollados porque seguimos sin definir objetivos nacionales y no pasa nada.

Somos subdesarrollados porque no tenemos ni educación cívica ni educación política y no pasa nada.

Somos subdesarrollados porque no exigimos la realización de las grandes reformas que se requieren en temas sensibles y no pasa nada.

Somos subdesarrollados porque seguimos creyendo en aquellos que han desfalcado al Estado y no pasa nada.

Somos subdesarrollados porque aceptamos que quienes han tenido muerte política sigan actuando abiertamente a través de terceros y no pasa nada.

Somos subdesarrollados porque somos proclives a generar autocompasión y a considerar que tenemos derecho a tratamientos especiales y no pasa nada.

Somos subdesarrollados porque privilegiamos el interés particular al interés general y no pasa nada.

Somos subdesarrollados porque respetamos la ley, pero no la cumplimos y no pasa nada.

Somos subdesarrollados porque confundimos patriotismo con patrioterismo y no pasa nada.

Somos subdesarrollados porque consideramos que los problemas se resuelven si se tiene una norma o una ley de por medio y no pasa nada.

Somos subdesarrollados porque no cuidamos como propio el espacio público y no pasa nada.

Somos subdesarrollados porque creemos que a punta de peajes tendremos unas estupendas carreteras y no pasa nada.

Somos subdesarrollados porque creemos que con decisiones como el pico y placa solucionamos los problemas de movilidad y no pasa nada.

Somos subdesarrollados porque somos cortoplacistas y no previsivos y no pasa nada.

Somos subdesarrollados porque no resolvemos los problemas, sino que aplicamos paliativos y no pasa nada.

Somos subdesarrollados porque nos contentamos y nos resignamos con los subcampeonatos y los virreinatos y no pasa nada.

Somos subdesarrollados porque casi siempre nos queda faltando el centavo para el peso y no pasa nada.

¡Somos subdesarrollados porque tenemos mentalidad de subdesarrollados!

NOTA: A algunos de los precandidatos para el Congreso o para la Presidencia, podría aplicárseles el dicho que dice: “No rebuzna por la configuración del pescuezo”.