martes, 31 de agosto de 2021

De cara al porvenir: administrando el país

Pedro Juan González Carvajal
Por Pedro Juan González Carvajal*

Para aquellos que quieren ser presidente de Colombia en el próximo período y de verdad quieren hacer algo, sugiero algunas acciones, de manera respetuosa.

Sea lo primero, que todos los candidatos acepten que hay algunos temas que son comunes y requieren solución inmediata: no interesa que los enuncien, pues todos sabemos cuáles son, sino que presenten propuestas concretas para enfrentarlos. Las cacareadas reformas tributaria, de la salud, de la educación, de la justicia, de las pensiones, de la propiedad y tenencia de la tierra, del cambio climático, de la reforestación, de la explotación minera, entre otras, que no dan más espera.

Los debates, si los hay, deben ser para escuchar las propuestas de solución integrales para cada uno de estos temas.

Hacer un pacto de caballeros para que congresista que cometa delito y sea declarado culpable, no será reemplazado, y se pierde la curul, para castigar también a quien dio el aval.

Tener como punto de partida un axioma gerencial: “No por hacer más de lo mismo se van a obtener resultados distintos”.

Sea lo primero, partir del principio de la legalidad por encima de cualquier consideración. Lo que esté por fuera de la ley no tiene cabida ni interés alguno.

Al estructurar las listas de los partidos que avalarán a los candidatos, exigirles a los candidatos al Congreso, que una vez definidas las líneas programáticas que serán soporte al programa de gobierno, cada aspirante deba aportar para conseguir el aval, un proyecto de ley debidamente elaborado para que el 20 de julio de 2022, cuando se instale el Congreso de la República, el Gobierno entrante radique los 100 proyectos de Ley que aspira a potenciar en los primeros años de su mandato: eso es comenzar a gobernar desde el primer día y no botar el primer año de gobierno dizque conociendo y entendiendo qué dejó el Gobierno anterior.

Importante no desgastarse poniendo retrovisor: si no le gusta lo que encontró, pues entonces ¿para qué se propuso ser presidente? Además, comenzó mal, pues eso implica que no estudió la realidad que le correspondería enfrentar y que las llamadas “comisiones de empalme” resultan siendo un fracaso.

Formalizar la economía informal y crecer el segmento poblacional de la clase media.

Promover el ahorro. Preparar una verdadera reforma tributaria.

Evitar el ejercicio del gobierno como un “gobierno mediático y farandulero”: Aquí se gobierna es trabajando y no haciendo ruedas de prensa por parte de cada entidad de manera permanente.

Reconstruir el andamiaje diplomático de la República, manejándolo como “Asunto y política de Estado”.

Garantizar la soberanía alimentaria y energética.

Garantizar plena independencia del Banco de la República.

Garantizar un equilibrio de poderes verdaderamente democrático. No se deben alinear al gobierno de turno ni la Contraloría General de la Nación, ni la Fiscalía, ni la Procuraduría, ni la Defensoría del Pueblo.

Darle el nivel que merecen a la Auditoría General de la Nación y a la figura de la Contaduría General de la Nación y ponerlas a funcionar de manera efectiva.

Cambiar de estrategia para el manejo de los bienes provenientes de la Extinción de Dominio.

¿Por qué no pensar finalmente en un verdadero modelo de desarrollo?

Definir una estrategia integral para el campo y la realidad rural.

Siendo coherentes con los Acuerdos de Paz, plantear la posibilidad de aplicar el concepto de Defensa Nacional, en el cual, las Fuerzas Militares se adscriben al Ministerio de Defensa y la Policía Nacional al Ministerio del Interior.

Aun cuando sea ingenuo, plantear una agenda de trabajo seria con los Estados Unidos sin que se afecte el concepto de autonomía y de soberanía nacional.

NOTA: las imágenes de un Edificio alto que compite con el Castillo de San Felipe en Cartagena y la pintura de una sección de sus murallas históricas, le dejan a uno “un sinsabor agridulce” y ciertas ganas de matar y comer del muerto. ¡No hay derecho!

¡Y nosotros criticando la barbarie cultural de los talibanes!