Por Pedro
Juan González Carvajal*
Ya avanza el año y los nuevos gobiernos locales se
van asentando. Entre otras curiosidades, ambos gabinetes, tanto el departamental
como el municipal, nos muestran una mezcla de profesionales muy preparada
académicamente, con buena experiencia en lo público y en lo privado, donde la
alta presencia femenina debe ser considerada como una importante señal de
éxito.
Hace reiteradas invitaciones en su discurso de
posesión el señor alcalde de Medellín a que apliquemos el POT y volvamos, no
solo a mirar, sino a desarrollar y a construir en el centro de la ciudad. ¡Enhorabuena!
La comuna central ofrece unas condiciones iniciales maravillosas, pues ya tiene
plena disposición de servicios públicos domiciliarios. Lo que falta es un
proyecto macro que la oriente y la potencie. En ese orden de ideas, recordemos
que una cosa es desarrollar o construir desde cero, otra es desatrasar, es
decir, ponernos al día con respecto a algún parámetro preestablecido, y otra es
reconstruir.
Quisiera de la
manera más respetuosa, sugerir que para potenciar el reverdecimiento del centro
y de toda la comuna central, es importante no solamente generar estímulos
tributarios en términos de impuesto predial y de industria y comercio para
motivar a los inversionistas, a los futuros habitantes y a futuros dueños de
establecimientos, sino, además, generar atractivos o estimulantes polos de
atracción de todo tipo que sirvan como detonantes y generen vida y movilidad
para que los inversionistas hagan sus respectivas apuestas.
Al terminar la Segunda
Guerra Mundial, Europa, Rusia y Japón estaban sumidos en un alto nivel de
destrucción. Hoy por hoy, Europa se ha convertido en un museo viviente, donde
año tras año centenares de millones de turistas recorren sus calles, admiran
sus construcciones y valoran el carácter patrimonial de su arquitectura y los
grandes tesoros que albergan sus museos.
¿Por qué no pensar una estrategia similar a la
desarrollada por esos países para sacar adelante lo mandado por el POT? He aquí
algunas ideas:
En términos de desarrollo o de construcción, ¿Qué
tal si construimos el Museo de Historia Natural de Antioquia planteado en su
momento por Expedición Antioquia 2013 en el sector de Lovaina, o construimos el
Gran Centro de Espectáculos que la ciudad requiere por ese mismo sector?
En términos de desatrase, ¿Qué tal si orientamos
los nuevos diseños de las rutas del sistema integrado de transporte hacia esas zonas,
como un verdadero vector de redensificación para que los constructores de proyectos
y amoblamientos habitacionales miren hacia ese sector?
Y en términos de reconstrucción, ¿Qué tal si en
vez de seguir apostándole a la nostalgia, nos proponemos levantar de nuevo
nuestros recordados y añorados grandes hitos arquitectónicos que no supimos
valorar ni cuidar en su momento y construimos de nuevo el Circo España, el Teatro
Bolívar y el Teatro Junín, en lugares estratégicamente definidos para que con
su presencia generen y convoquen actividad ciudadana y podamos contar como
ciudad con verdaderos escenarios dedicados a las artes en todas sus
expresiones? Miremos lo que hoy está haciendo París con Notre Dame. La
levantarán de sus ruinas y quedará esplendorosa, sin lugar a duda.
Existen los planos de esas edificaciones en Planeación
Municipal. Existe la tecnología. Tenemos a nivel local instituciones como la
Fundación Ferrocarril de Antioquia con vasta experiencia y contamos con
Facultades de Arquitectura y Arquitectos consumados como Álvaro Sierra, Óscar Mesa,
Laureano “Nano” Forero, Alejandro Echeverry, entre otros varios, que
tranquilamente podrían volvernos a regalar esos añorados espacios.
Y el aspecto financiero,
pues ya está inventado y nosotros apenas lo comenzamos a implementar. Empleemos
las adecuadas APP para que podamos acceder a recursos y socios frescos, con
vasta experiencia internacional o nacional, y hagamos posible que en 4 años de
gobierno podamos de verdad hacer muchas cosas, en todos los órdenes, para bien
de Medellín, de Antioquia y de Colombia.