viernes, 19 de julio de 2019

La historia del federalismo en Antioquia - Tercera parte


Por Julio González Villa*

Julio González Villa
La constitución antioqueña de 1812

Fruto de la Asamblea Constituyente posesionada a finales de 1811, sus trabajos terminaron el 21 de marzo de 1812 cuando Antioquia expide su Constitución: “El Serenísimo Colegio Constituyente estableció, aprobó y sancionó la Constitución del Estado”. Francisco Duque Betancur, Historia del Departamento de Antioquia; Imprenta Departamental; 1967. Pag. 437.

En esa Constitución de 1812, resalta la influencia de la revolución francesa con sus conceptos de libertad, igualdad, seguridad y propiedad, consagrados como derechos del hombre imprescriptibles y sagrados. Axiomas como el del contrato social de Rousseau, y cómo Antioquia ha decidido forjarse su propio camino, al reasumir soberanía.

“Los Representantes de la Provincia de Antioquia, en el Nuevo Reino de Granada, plenamente autorizados por el pueblo, para darle una Constitución que garantice a todos los Ciudadanos su LIBERTAD, IGUALDAD, SEGURIDAD Y PROPIEDAD; convencidos de que, abdicada la corona, reducidas a cautiverio, sin esperanza del postliminio las personas que gozaban el carácter de Soberanas, disuelto el gobierno que ellas mantenían durante el ejercicio de sus funciones, devueltas a los Españoles de ambos hemisferios las prerrogativas de su libre naturaleza, y a los Pueblos las del contrato social, todos los de la Nación, y entre ellos éllos el de la Provincia de Antioquia, reasumieron la soberanía y recobraron sus derechos; íntimamente persuadidos, que los Gobiernos de España por su estado actual, y por su inmensa distancia es imposible que nos liberten de la tiranía y del despotismo, ni que cumplan con las condiciones esenciales de nuestra asociación; viendo, en fin, que la expresión de la voluntad general manifestada solemnemente por los pueblos es, de que usando de los imprescriptibles derechos concedidos al hombre por el Autor Supremo de la naturaleza, se les constituya un gobierno sabio, liberal, y doméstico, para que les mantenga en paz, les administre justicia, y les defienda contra todos los ataques, así interiores como exteriores, según lo exigen las bases fundamentales del pacto social y de toda institución política; después de un maduro exámen, y profundas reflexiones, hemos acordado y convenido en los artículos siguientes:

1. El Pueblo de la Provincia de Antioquia, y sus Representantes, reconocen y profesanla Religión Católica, Apostólica, Romana, como la única verdadera: ella será la Religión del Estado.

2. Considerando que el olvido de los sagrados e imprescriptibles derechos del hombre y de las obligaciones del Ciudadano es la causa primaria y el origen del despotismo, de la tiranía y de la corrupción de los Gobiernos, y que por este mismo olvido e ignorancia los Pueblos sufren por muchos siglos la esclavitud y las cadenas ó cometen mil excesos contrarios al orden y a la institución de las Sociedades; nosotros, los Representantes del bueno y virtuoso Pueblo del Estado de Antioquia proclamamos a la faz de las Naciones y bajo los auspicios del Todo Poderoso, los siguientes derechos del hombre y los deberes del ciudadano, para que indeleblemente permanezcan gravados en todos los corazones”. Francisco Duque Betancur, ob. Cit. Pag. 438

Resaltamos en esta Constitución de 1812 la profesión expresa de catolicismo en Antioquia como un concepto esencial en el pueblo antioqueño.

Debemos recordar que 2 días antes de la expedición de esta Constitución, se había aprobado en España la Pepa, constitución española llamada Pepa por haber sido expedida el día de San José (19 de marzo). Constitución bastante liberal, elaborada por las Cortes españolas reunidas en Cádiz ante la invasión francesa y el apresamiento de los reyes por Napoleón. En esa Constitución la soberanía reside en la Nación y ya no en el Rey, pues establece una monarquía constitucional.

Después de la expedición de la Constitución de 1812, el mismo año se decreta cuál es el escudo de Antioquia:

“Cámara del Senado, Antioquia, agosto 23 de 1812… Que el Estado tome por armas en sus escudos públicos y en el gran sello del Despacho de los negocios, una matrona vestida y adornada a la indiana, sentada entre el plátano y la palmera, y reclinada al pie de un cerro de oro, con un río caudaloso a sus pies, encasquetándose en la más airosa actitud, el gorro de la Libertad”. Escudo que hasta hoy es el escudo oficial de nuestra tierra.

También en 1812 se formaliza la creación de la primera Universidad en Antioquia:

El 27 de agosto de 1812 “El Serenísimo Colegio reunido en Antioquia decretó… la creación de un colegio de estudios mayores en Medellín”. Francisco Duque Betancur, ibidem 440.

Ese Colegio es la actual Universidad de Antioquia, que inicialmente había sido fundado por Fray Rafael de La Serna en 1803, Franciscano, pero como esta comunidad no apoyó la causa de la independencia, el Colegio pasa a ser propiedad del Estado a partir de 1810.

El 9 de octubre de 1822, “mediante una ley del Congreso, el Vicepresidente Santander expidió un decreto con la firma de su secretario del Interior, el antioqueño doctor José Manuel Restrepo, por el cual se creaba en Medellín un instituto denominado Colegio de Antioquia, con el cual se estableció en forma ya más definida el colegio, que en el transcurso del tiempo vino a tener diversas facultades con el nombre meritorio e ilustre de Universidad de Antioquia”. Francisco Duque Betancur, Ob. Cit. Pag. 583.

El 10 de noviembre de 1812 Antioquia hace “el reconocimiento solemne del Congreso de la Nueva Granada como autoridad suprema de las Provincias Unidas y a la vez hizo el juramento del mismo en febrero de 1813, con lo que Antioquia daba toda su contribución por la unión de la Patria”. Francisco Duque Betancur, Ibídem Pag. 442. “Pero consecuentemente hubo de sostener una fuerte polémica con don Antonio Nariño durante la primera mitad de este último año, por cuanto este ilustre mandatario pretendía que Cundinamarca primara sobre el Congreso de la Unión, lo que a las claras no solo estaba contra lo firmado, sino contra los más elementales principios de la democracia. Por este motivo y a causa de algunos malos tratamientos que experimentaron algunos antioqueños en Cundinamarca, el Presidente Restrepo (José Miguel de Restrepo, padre de Don José Manuel Restrepo, éste historiador y cercano a Bolívar), no quiso reconocer oficialmente a los señores don Primo Groot y don Manuel Pardo, Diputados escogidos por Nariño para tratar con el gobierno de Antioquia, polémica ésta que fue publicada en la imprenta del Gobierno de Cartagena…” Francisco Duque Betancur, ibidem, pag. 443.