jueves, 26 de enero de 2023

Vigía: ¿Está Colombia envenenando a Ecuador?

Coronel John Marulanda (R)
Por John Marulanda

Desde Davos, en donde asistieron los presidentes de Colombia, Ecuador y Costa Rica, el primer mandatario colombiano se comunicó con sus subalternos sobre la grave crisis del suroccidente del país, en el municipio de Rosas, que obligó a que el gobierno colombiano utilizara al Ecuador para abastecer a Nariño. El próximo 5 de febrero, los ecuatorianos elegirán juntas parroquiales, alcaldías y consejos provinciales y decidirán en las urnas si aprueban o no la extradición a Estados Unidos de sus paisanos acusados por narcotráfico. Con una producción de unas 1.500 toneladas métricas de cocaína en Colombia, más del 70 % saliendo por el andén Pacífico colombo-ecuatoriano y con el dólar como la única moneda oficial en Suramérica, el Ecuador se ha convertido en el paraíso de los narcotraficantes.

La muerte de alias «Rasquiña», quien lideraba a los Choneros y sus bandas aliadas fue el disparador de una serie de 11 masacres con más de 400 presos torturados y asesinados en seis cárceles de Ecuador. La Penitenciaría del Litoral, en Guayaquil, testimonió el asesinato de 119 presos, el peor de la historia de Ecuador y el quinto más sangriento en Latinoamérica. Unas 20 bandas integradas por 40 mil delincuentes aproximadamente en este país de 18 millones de habitantes, es preocupante. En noviembre del 22, dos cadáveres decapitados y colgados de un puente en Esmeraldas, son la marca territorial mexicana en esa provincia limítrofe, precisamente, con el convulso Nariño. También en ese mes, se registraron 13 atentados, 5 policías asesinados y otros dos malheridos, lo que llevó al presidente Lasso a declarar estado de excepción en esas regiones.

Todo empezó en el 2006, cuando Jorge Briceño, “Mono Jojoy”, anunció que las FARC financiaron la campaña de Rafael Correa con 400 mil dólares, marcando de una vez el destino narco político en ese país. Los hermanos Ostaiza, Chauvin, Patiño, los Larrea, el capitán Telmo Castro, asesinado en la cárcel, el ex vicepresidente Glass, vinculado a Odebrecht y una lista interminable de funcionarios y jueces se han “incorporado” a las huestes de esta fresca narco red. Hace pocos días estalló un nuevo escándalo de corrupción en el sector energético: el actual secretario Anticorrupción, Luis Verdesoto renunció a su cargo; un cuñado de Lasso fue relacionado con este caso.

En medio de “una sociedad totalmente descompuesta” según Luis Córdoba, académico de la U Central, no es de extrañar que una funcionaria colombiana, aplauda el renacimiento del Alianza País del convicto Correa, otro ex que se uniría a la lista de izquierdópatas latinoamericanos. Todo un tendido rojo que parece controlar la política regional, con el beneplácito de rusos y chinos, contradictores de US, el imperio proveedor y, por momentos, protector. La simpatía de Petro a los crecientes cultivos ilegales ¿es el motivante de tal turbulencia? La Confederación Indigenista del Ecuador (Conaie) ¿se aprovecha de esa situación?

Acotación: además de Venezuela, Cuba y Nicaragua, Colombia y otros países de la región también han adquirido armamento ruso. Donarlo a Ucrania que US lo reemplazará, dijo la general Richardson comandante del Ussouthcom. Aquí solo tenemos helicópteros MI-17. ¿Qué dirán Venezuela y Nicaragua?